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REMEDIOS CASEROS PARA LA LA FALTA DE APETITO
La falta de apetito se manifiesta por una desgana en la ingesta de alimentos y normalmente se debe a circunstancias pasajeras que no implican una enfermedad o trastorno.
Habitualmente, el apetito vuelve de forma natural sin que se deba hacer nada para recuperarlo. Pero, en ocasiones, la inapetencia puede prolongarse en el tiempo y puede ser un indicativo de que algo no está funcionando como debe. Por ello, se recomiendan analizar sus causas para llegar a la raíz del problema.
CAUSAS Y TRATAMIENTOS PARA LA FALTA DE APETITO
Empacho:
suele ser la causa más común y se debe a una indigestión por una comida en exceso o una mala combinación de alimentos que saturan al organismo durante un tiempo determinado en el que no apetece ingerir nada.
Esta reacción forma parte del proceso normal de recuperación del cuerpo y, simplemente, hay que respetar el descanso digestivo correspondiente para que todo vuelva a la normalidad.
Embarazo:
el primer trimestre de embarazo suele provocar reacciones adversas en algunas mujeres como mareos, náuseas, vómitos y malestar, siendo muy común también la pérdida del apetito durante su transcurso como consecuencia de la fatiga.
Al igual que en el punto anterior, la pérdida del apetito se recupera de forma natural que, por lo general, suele ser a partir del cuarto mes cuando las hormonas se estabilizan. Salvo aquellos casos en los que la fatiga se acuse de manera muy severa o se prolongue más allá del primer trimestre pudiendo suponer un riesgo para la salud del feto por la desnutrición.
Intoxicación:
una intoxicación presenta una sintomatología más persistente que una simple indigestión y puede ser debida al consumo de alimentos en mal estado o al exceso de ciertas sustancias como el alcohol, que tienen la capacidad de intoxicar al organismo muy rápidamente acusando la manifestación de varios síntomas adversos entre los que puede aparecer la falta de apetito.
En estos casos tampoco se recomienda tratamiento médico, salvo que los síntomas vayan acompañados de vómitos y diarreas, en cuyo caso habrá que acudir al médico para descartar la gastroenteritis entre otras afecciones del aparato digestivo y evitar la deshidratación.
El uso de algunos medicamentos,
como los antibióticos o fármacos quimioterapéuticos también pueden provocar inapetencia en algunas personas y la situación se revierte de forma natural al suspender o terminar el tratamiento.
Las drogas y bebidas estimulantes,
como el café, pueden eliminar el apetito hasta la desaparición de sus efectos.
Las enfermedades del aparato digestivo
también incluyen la pérdida de apetito entre sus síntomas frecuentes. En estos casos la inapetencia se presenta de forma prolongada y suele ir acompañada de otros síntomas como nauseas, gases, distensión abdominal etc. debiéndose acudir al médico para diagnosticar el problema.
Las enfermedades infecciosas
también suelen producir inapetencia durante su transcurso entre otros síntomas característicos como la fiebre.
Una vez que haya desaparecido la infección y se haya completado el tratamiento el apetito volverá a su estado habitual sin tener que hacer nada por recuperarlo.
Enfermedades graves
y de carácter crónico, como el cáncer, pueden alternar periodos de inapetencia acompañados de fatiga y malestar generalizado que suelen evidenciar la causa tras la realización de las correspondientes pruebas diagnósticas.
REMEDIOS CASEROS PARA LA FALTA DE APETITO
Existen diversos remedios caseros para la falta de apetito, con ellos podremos tratar de estimular las ganas a comer.
1. zumo de tomate
Si la falta de apetito es por problemas digestivos, el zumo de tomate puede ser útil. Este zumo es rico en vitaminas y minerales, los cuales pueden ayudar a proteger nuestro sistema digestivo.
Para la preparación de este zumo se necesita:
– 2 tomates.
– Agua.
– Una pizca de sal.
Triturar los tomates en la licuadora junto con el agua hasta que no queden grumos del tomate y agregarle una pizca de sal. También se puede usar el limón para que no sepa tan fuerte.
2. Comer un ajo
Antes de la comida (media hora antes) es recomendado tomar un diente de ajo, debido a que sus propiedades estimulan el sistema digestivo y puede favorecer a que tengamos más hambre.
3. Té de canela
Tomar en el desayuno un té de canela ayuda a abrir nuestro apetito durante la hora de la comida.
Agregar en un vaso de agua caliente un poco de canela y dejarla reposar por algunos minutos para que, de esta forma, la canela libere todas sus propiedades.
4. Infusión de laurel
El laurel seco puede ayudar a abrir el apetito y, además, es un tónico digestivo. Hierve 1 litro de agua con 25 gr de laurel durante unos minutos. Déjalo reposar, cuélalo y tómate una taza 15 minutos antes de cada comida.
5. Cardamomo
Esta especia ayuda a aumentar el apetito y estimula la secreción de saliva. Prepara una infusión de 20 gramos de semillas en polvo en medio litro de agua. Toma una taza de esta infusión antes de cada comida fuerte del día.
RECOMENDACIONES Y CONSEJOS PARA EL TRATAMIENTO DE LA FALTA DE APETITO
1. Respetar el periodo de descanso digestivo
recomendado en los casos de excesos e indigestiones para no sobrecargar al organismo y adelantar la remisión de los síntomas.
2. Beber líquido
(especialmente agua) entre las comidas, pues el agua ayuda a eliminar las toxinas de la demasía alimenticia favoreciendo la recuperación e incentivando el apetito.
3. Comenzar por realizar comidas ligeras
a medida que el apetito se reponga hasta la total recuperación.
4. Cuando la falta de apetito se deba a la ingesta de medicamentos
puede consultar con el médico o farmacéutico la posibilidad de un cambio en el tratamiento para evitar o disminuir los efectos secundarios.
5. Acudir al médico
cuando los síntomas persistan o se acompañen de otras reacciones adversas que pudieran ser indicativo de otros trastornos o enfermedades como las que se exponen en los puntos anteriores.