El descanso y el sueño son vitales para el buen funcionamiento de la mente y el cuerpo. Pero ¿qué hacemos cuando el cuerpo se rehusa a descansar? La mente sigue encendida y no quiere irse a dormir. El insomnio es una de las cosas más detestables que hay. No temas, hay soluciones para recuperar los dulces sueños.
Muchos recomiendan visitar a un psiquiatra y obtener soluciones farmacológicas. El problema con este enfoque, como con todas las drogas, es que existe el riesgo de desarrollar tolerancia y dependencia. Esto significa que se necesita cada vez una mayor dosis y que necesitamos cada vez más. Por eso se recomienda primero intentar con un enfoque que regule más naturalmente esta función vital del organismo.
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Remedios caseros para combatir el insomnio
-Regular el ritmo de sueño:
El sistema biológico de nuestro cuerpo funciona en base a un ritmo que se adapta a la exposición de la luz del sol y la oscuridad de la noche. Este ritmo se llama ritmo circadiano y es un ciclo que regula la vigilia y el sueño.
¿Qué significa esto? Que el cuerpo tiene que estar acostumbrado a un ritmo continuo de sueño. Una persona que se levanta a las 11 de la mañana y se acuesta a las 3 de la mañana tiene que ser conciente de que su reloj interno esta desconfigurado. El mejor remedio para poder conciliar el sueño de noche es levantarse temprano a la mañana. Si bien esto puede requerir un esfuerzo inicial durante las primeras dos semanas, una vez que el organismo se acostumbra, el cuerpo se auto-regula, y la vigilia aparece naturalmente por la mañana y el sueño por la noche.
-Ejercicio físico:
Nada te hace dormir mejor que estar físicamente cansado. Pasé dos meses trabajando en el campo y si bien no me cansaba mentalmente, el cansancio físico era de un nivel al que no estaba acostumbrado. Nunca fuí de dormir siesta en mi vida, pero después de trabajar toda la mañana, la siesta era algo necesario. ¿Tenés problemas para dormir? Hace entre 20 y 40 minutos de ejercicio físico antes de irte a dormir. A veces el cuerpo simplemente no esta cansado y se rehusa a dormir.
Esto puede significar adquirir un nuevo hábito, pero el ejercicio físico trae muchos beneficios. Está comprobado cientificamente que el ejercicio hace que el cuerpo libere una dósis de endorfinas en el cerebro que genera una agradable sensación de bienestar similar a lo que producen algunas drogas. El ejercicio físico es una de las actividades más gratificantes que puede haber para quien se acostumbra.
Un gimnasio, salir a andar en bici, aprender skate, patinar en rollers, practicar un arte marcial o salir a correr son algunas buenas opciones.
-Leer un buen libro:
Otro hábito productivo para adquirir. Mirar una película o serie antes de dormir puede estimularte más que relajarte lo cual hace más difícil el conciliar el sueño. Leer es una práctica tranquila conocida por sus efectos relajantes inductores de sueño. Sin mencionar por supuesto el enriquecimiento intelectual e imaginativo que produce en la mente.
-Controlar la respiración:
Una práctica que sirve para conciliar el sueño es controlar la respiración. A veces el organismo esta muy nervioso, estresado o excitado como para lograr conciliar el sueño, y controlar la respiración es un método efectivo para calmar al cuerpo. Al respirar más profunda y pausadamente, se reduce el ritmo sanguíneo y el cuerpo se relaja, se vuelve menos tenso. La meditación tiene que ver con esto también. Dejar de lado las preocupaciones del día y concentrarse en la respiración es un ejercicio para dormir más efectivo que contar ovejitas.
-Extracto de valeriana:
Pasamos de los hábitos a las drogas naturales. La valeriana officinalis es una planta medicinal utilizada como sedante natural. Se prescribe para el insomnio, la neurosis y otras afecciones. Aparentemente según wikipedia también tiene efectos psicoactivos sobre el comportamiento de los gatos, así que ojo con tus mascotas.
Se puede pedir en la farmacia y viene en pastillas que contienen el extracto de la planta. Si bien existen otras presentaciones, personalmente he tenido buenos resultados con esta forma.
-Té de lechuga:
Lo mejor para el final. Por extraño que parezca, este es el método que más resultado ha dado en casos de insomnio. Doy fe personalmente de los efectos de este método. Aparentemente, al hacer una infusión de la lechuga, esta desprende un alcaloide con efectos similares a la morfina en el organismo. Esto no es un hecho desconocido para médicos quienes recetan esta infusión tanto para embarazadas quienes no pueden consumir fármacos, así también como una alternativa para pacientes psiquiatricos que están dejando medicamentos ansiolíticos.
¿Cómo se prepara?
En un jarrito con agua, hervir 2 hojitas de lechuga durante 10 minutos.
Opcionalmente se puede hervir junto con un poco de hojas de menta para saborizar.
Colar y dejar enfriar un poco.
Aderezar con azúcar o miel a gusto.
El sabor no es desagradable, y los efectos son sorprendentes.
Sea cual sea el enfoque que decidas tomar, siempre es más recomendable implementar estos antes que recurrir a la farmacología. Regular tu ritmo de sueño es uno de los pilares fundamentales de vivir una vida mejor.
