Ampollas

Las ampollas o ámpulas son el resultado de una fricción o roce constante que tiene una parte de la piel (pies, manos, etc.) con un objeto (calzado, raqueta de tenis, herramienta de jardín, entre otros)

 

Remedios naturales para las ampollas
-Frotar ligeramente el área con un cubo de hielo para alejar el dolor que crea la formación de una ampolla.

 

-Confeccionar un apósito de algodón con hojas de repollo hervidas en leche y luego aplicar caliente tres veces al día.

 

-Confeccionar una cataplasma con zanahoria rallada y aplicar directamente sobre la región afectada.

 

-Aplicar el jugo de 2 ó 3 dientes de ajo directamente sobre la ampolla.

 

-Verter unas gotas de aceite esencial de lavanda en una gasa y colocar sobre la ampolla. (remedio de aromaterapia)

 

-Aplicar una pasta de harina de maíz y miel si la ampolla se revienta para evitar una infección.

 

-Aplicar una capa de gel de áloe vera si se revienta una ampolla.

 

-Aplicar, mediante una bolita de algodón, aceite del árbol del té mezclado con agua sobre las ampollas 2 veces al día con el fin de calmar el dolor y prevenir infección

 

-Mezclar en partes iguales de miel y aceite de germen de trigo y aplicar en la zona para reducir la fricción o irritación que pudiera existir.

 

 

Recomendaciones generales

-No reventar, en términos generales, la ampolla. Con el fin deevitar el riesgo de una infección, se recomienda no perforar una ampolla.

-Sin embargo, existen especialistas que aconsejan drenar una ampolla si ésta es demasiado grande o está ubicada en una zona donde se recarga el peso corporal.

En este caso, se aconseja lavar la ampolla con agua y jabón o pasarle un algodón con alcohol o agua oxigenada.

Luego, pinchar con una aguja desinfectada con alcohol o con la llama de un fósforo (La incisión debe ser pequeña, pero apropiada para permitir que salga el líquido) Posteriormente, secar el líquido con una gasa antiséptica y luego aplicar un pequeño vendaje con una abertura en el centro para que penetre el aire.

 

-No retirar la cubierta. Si se ha drenado o reventado la ampolla, no se debe retirar la cubierta (la piel que cubre la ampolla), ya que la zona terminará muy enrojecida, sensible e irritada. Es mejor dejarla puesta para que proteja la piel hasta que sane completamente.

 

-Escoger un material sencillo de protección. Además de la cubierta natural de piel de la ampolla, se recomienda cubrirla y protegerla con una venda adhesiva flexible. Sin embargo, cuando la ampolla es demasiado grande, se aconseja los apósitos de gasa estéril y para fijarlos se emplee cinta adhesiva a prueba de agua.

 

-Ventilar un poco la ampolla. Se aconseja remojar la ampolla en agua y dejarla al aire libre para que se ventile durante toda la noche con el fin lograr una más rápida curación.

 

-Cambiar las gasas húmedas o mojadas. Si las gasas se han mojado por alguna razón, se puede considerar que se ha contaminado y debe cambiarse. Esto significa que se deberá cambiar las gasas con bastante frecuencia si los pies transpiran mucho o si realiza actividades que produzcan sudación y las humedezca.

 

Sandra Hidalgo Padilla

Licencia en Psicología y máster en gestión de RRHH en la empresa. Desde 2012 webmster y SEO de varios blogs propios.

More Posts - Website - Google Plus


Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *